Los cuartos de baños como cualquier estancia de una vivienda, necesita una correcta ventilación diaria para la renovación del aire de dicho espacio.
Además, en el caso de los cuartos de baños esta ventilación es más necesaria si cabe, al ser un espacio húmedo. Estas estancias, al recibir la humedad que se genera con el agua, especialmente caliente, tienden a acumular humedad, que si no se elimina correctamente con una apropiada ventilación pueden provocar problemas, como mohos o grietas en la pintura de las estancias.
Por ello estas estancias tienen que disponer de una ventilación apropiada. En nuestro caso siempre que vamos a realizar una reforma de un cuarto de baño, lo primero que analizamos en que tipo de ventilación puede darse a la estancia, la cual la dividimos en 2 clases: ventilación directa y ventilación indirecta.
Ventilación directa.
Como su nombre indica se trata de un tipo de ventilación directa, que en la mayoría de los casos lo logramos con la presencia de una ventana en la propia estancia. Se trata de la forma más eficiente para dar una ventilación a dicho espacio. En estos casos suele recomendarse la instalación de ventanas tintadas y con un mecanismo de apertura oscilobatiente, que nos permite guardar la privacidad del cuarto de baño y a l mismo tiempo lograr un correcta ventilación y renovación del aire de dicha estancia.